domingo, 2 de octubre de 2022

Estampitas

por Marcos Gunn

 

 

Como quien enciende una vela en madrugada

queda en evidencia la decisión del general

la cuestión siempre ha sido de sangre y tiempo

 

Sentada en cicatrices, las de adelante

como dice Gabo Ferro,

gentil con el infierno

 

Es la historia de las ventanas,

así son los cuadros, amada,

dos cero uno sobre madera rosa,

 

fuera de plano, el viento

ingresa, nos persigue

como un duende de la siesta

 

La madera parece de mentira,

un dulce de la casita de la bruja,

tan perfecta que sonrojaría

a don Johansenn Maestreperro

 

duro como bossa n’ piedras

el convidado nos espera

tocando en un bajo reventado

no soy un extraño

 

Parece que al final

éramos como esos pibes

extrañados de las redes

a los que un cristo siempre invita a una vida de pesca

 

Perros adictos a la música de las radios

como aquellos grillos preciosos que traía el viento

entrando en la cocina por las noches

 

con la piel de las estrellas

el perfume del planeta

y su más silenciosa perla

 

Cualquier cosa,

una tormenta, a veces nada

como quien enciende una vela en otra madrugada gris

 

con su expectativa de preludio,

uno más de tantos amaneceres tristes

donde la única buena noticia sos vos